viernes, 25 de julio de 2008

Tigre ¿Ciclo excepcional de desarrollo?

Un importante periódico de la localidad de Benavidez, en su salida del mes de junio tituló, que el camino de los remeros, es un símbolo de un ciclo excepcional de desarrollo del distrito de Tigre. También menciona la existencia de un mapa de desarrollo urbano fenomenal, al extremo de que se construyen caminos completamente nuevos, donde antes sólo había bañados. Intuyo que existe una gran cantidad de Tigrenses que piensan de la misma manera.
Por el contrario, frente a estas aseveraciones, tengo que confesar que tengo más dudas que certezas y la multitud de interrogantes que me surgen son cuantiosos. ¿En que nos basamos para afirmar que Tigre tuvo un desarrollo urbano excepcional? ¿De que forma repercutió este desarrollo excepcional, en la calidad de vida de los casi quinientos mil habitantes del distrito?

Lo cierto es que Tigre, a lo largo de toda su historia jamás conto con un plan estratégico integral para su desarrollo urbano. Se instaló en su lugar un sistema de mercantilismo corporativo y hermético, en el cual las decisiones sobre la vida social, económica y política, se concentraron cada vez más en manos de grupos de poder privados, exentos de toda responsabilidad social, que operaron en un marco de extrema impunidad.
No obstante el fenomenal crecimiento que presuntamente registró el Tigre, para algunos la Nueva Miami, la comunidad del distrito todavía no ha podido ni siquiera arañar parte del bienestar general, que devendría vía derrame económico. Efectivamente, no obstante la magnificencia de las obras construidas y por construir, el efecto que estas inversiones multimillonarias privadas y estatales, han tenido respecto al mejoramiento de la calidad de vida de la comunidad Tigrense, ha sido nulo.
A extramuros de las urbanizaciones fortificadas de ensueño, que crecieron como hongos durante la década del 90, en el 36,33% de los hogares de la región, viven cinco o más personas. Como dato comparativo, en San Isidro y Vicente López, el denominado Conurbano I, el índice es del 18,9%. Este hacinamiento habitacional afecta en mayor medida a niños y jóvenes. Casi el 60% de los menores de 14 años, habitan en viviendas de familias pobres. Como agravante, correspondería citar el crecimiento inusitado de las “villas miseria”.
Rastreados que fueron los últimos 30 años de historia Tigrense, no encontramos un solo plan oficial de viviendas, orientado a cubrir las necesidades habitacionales de la comunidad histórica del distrito. Por otra parte, sólo el 6% de la población está conectada con la red cloacal y menos del 50% recibe agua potable. Miles de habitantes deben abastecerse de este vital elemento, de canillas comunitarias.
Se considera que el 70% de la población del distrito, arroja el 30% de los residuos cloacales que produce en zanjas a cielo abierto.
Según datos oficiales, Tigre se encontraría entre los partidos del Gran Buenos Aires, que continúan registrando los índices más altos de desempleo y de empleo en negro de toda la zona norte, junto a Florencio Varela y a Merlo.
Más de la mitad de los asalariados del partido, no realizaría aportes previsionales. Efectivamente, de los trabajadores registrados, solo están realizando aportes jubilatorios en forma regular, un tercio de la población económicamente activa. Ello implica, hacia el futuro, que en Tigre tendrán prestación jubilatoria solo tres de cada diez personas.
En plena expansión de la sociedad basada en el conocimiento, en el Tigre, el 57% de los jóvenes entre 18 y 24 años no completó el secundario, mientras que sólo el 9% de los jóvenes de los hogares de menores ingresos, accede a la educación terciaria.
No hace mucho tiempo atrás, Sergio Massa, dio a conocer un dato realmente inquietante: Tigre presenta el mayor índice de mortandad infantil de la provincia de Buenos Aires.
Para evitar caer en el síndrome de Estocolmo y fundamentalmente porque no me dan los números, por el momento voy a evitar unirme a los aplaudidores del supuesto ciclo excepcional de desarrollo Tigrense.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Las cifras sorprenden y alarman, pero es muy bueno conocerlas.
Gracias por los datos.
Saludos vecinales.

Anónimo dijo...

El desarrollo urbano de Tigre se hizo en función de los negocios inmoviliarios sin tener en cuenta las necesidades de la población estable del distrito. Ahora hay que importar ricos para que ocupen los barrios cerrados.
Claudia de Baires

Anónimo dijo...

Los tigrenses quedamos para "cortapasto" de los importados....

Anónimo dijo...

Hola soy de San Rafael Prov de Mendoza, nosotros todavia tenemos grandes espacios verdes y bellos y no estamos invadidos de barrios privados (pero estan comenzando a surgir) creo que ud. deben defender un derecho propio por ser los pobladores de esa zona "nadie nos hace nada que no permitamos" DEFIENDAN SU PAISAJE NATURAL, luchen por una gestion urbanistica integrada no discriminada, no oponerse al crecimiento solo exigirlo regulado integrado y PARA TODOS
Sandra