Según el nuevo plan
de ordenamiento de Tigre, ya no se podrán construir ese tipo de emprendimientos
ni puentes que no sean peatonales; estará prohibida la circulación vehicular;
los isleños, satisfechos con la nueva normativa.
Por Laura Rocha | LA NACION
En las islas del Tigre ya no se podrán construir barrios
cerrados ni construir puentes que no sean peatonales. Tampoco estará permitida
la circulación vehicular. Las casas particulares y otros emprendimientos podrán
tener, como máximo, dos plantas y deberán seguir los lineamientos de la
arquitectura sustentable.
Éstas son sólo algunas de las características que delinearán
la fisonomía de la primera sección de islas del Delta, tal como lo establece el
flamante plan de ordenamiento aprobado por unanimidad por el Concejo
Deliberante del municipio la semana pasada, luego de un debate amplio y
participativo que se extendió por dos años.
El plan, que será presentado oficialmente hoy en Tigre,
pretende proteger el humedal del Delta para conservar la identidad insular y
permitir la urbanización en el marco del desarrollo sustentable.
"Uno de los principios rectores del plan es respetar la
inundabilidad del suelo y debe funcionar así para que se preserve el humedal.
Quien vaya a residir allí tiene que acostumbrarse a esa inundación. Algunas
inversiones que estaban apareciendo construían por encima de ese suelo
inundable. En ese sentido, se incorporó la prohibición de barrios cerrados en
la primera sección de las islas del Delta. Se puede hacer un condominio, con
administración común, pero no un barrio cerrado. Con respecto a las
construcciones para pasajeros, no se puede hacer un hotel de cinco pisos de
altura, pero sí uno extendido de dos plantas", detalló Norberto Iglesias,
de la Fundación Metropolitana, que asistió técnicamente este proceso de
formulación de leyes del Concejo Deliberante.
El plan de manejo fue aprobado junto a otras ordenanzas que
establecen las características de las construcciones, así como la regularización
dominial de la zona.
"Estamos frente a un acontecimiento inusual, histórico,
porque, en general, los concejos deliberantes no legislan desde una concepción
de planeamiento de mediano y largo plazo. Desde la Fundación Metropolitana
tenemos una gran expectativa de que éste sea el punto inicial de un trabajo de
planeamiento participativo para todo el delta del Paraná", dijo Pedro del
Piero, presidente de la Fundación Metropolitana.
En la nueva legislación se incorpora y se aconseja el uso de
la madera en las construcciones y se establece que las estructuras deben estar
sobre palafitos (los típicos pilares en los que se asientan las viviendas del
Delta), y las casas, elevadas. No se pueden rellenar los albardones ni
construir en el centro de las islas. "Esos espacios deben preservarse
inundables porque son los que sostiene el humedal isleño", agregó
Iglesias.
El intendente de Tigre, Sergio Massa, dijo a LA NACION:
"Lo más destacable es la constitución de una política de Estado, el fijar
reglas de manejo de un lugar y plantear que su eventual modificación requiera
de mayorías especiales no sea una cosa de un gobierno de turno, sino algo
permanente". Agregó:
"Lo segundo en importancia es que se escuchó a todo el
mundo, por eso llevó dos años el proceso; participaron los isleños, los
operadores turísticos, los hoteleros. Y eso permitió lograr una norma lo más
adecuada posible para cada uno de los sectores", agregó.
El plan también establece la transparencia hidráulica, lo
que asegura la libre circulación de las aguas entre los centros de isla y los
cursos de agua circundantes. Por eso no se admitirán alteraciones del perfil
natural de las islas, ya sea mediante rellenos, movimiento de suelos,
endicados, alteos y canalizaciones, así como tampoco la creación de lagunas
artificiales, marinas y espejos de agua.
Preocupación por la
propiedad.
Los isleños están satisfechos con el plan de manejo. Sin
embargo, algunos miran con desconfianza la ordenanza que establece la
regularización dominial.
"Es una lucha de muchos años, y las cuestiones de fondo
que pretendíamos se consiguieron. Pero interpretamos como expulsivas las
medidas para adecuar las construcciones. Nosotros no tenemos las herramientas
técnicas para poder hacer las reformas, de ser necesarias. Igualmente siempre
estamos abiertos a un diálogo constructivo", dijo Martín Nunziata, que
vive en las islas hace 35 años.
El intendente Massa indicó que "de ningún modo" se
pretende que esto se transforme en un gravamen, sino, por el contrario, en
facilidad. "Estamos trabajando con los consejos profesionales para que
puedan ayudar a los isleños y darles las herramientas que necesiten."
Replica de
Francisco Javier de Amorrortu.
1. Tratándose de
zonas de mucha mayor fragilidad, los criterios que se acuerden no deben estar
por debajo, sino por encima de los rigores que en otras áreas plantean las
leyes que reconocen exigencias de soportes de hidrología. Tal el caso de los
arts. 2340, inc. c, 2577 y 2572 del CC; así como los del art 59 de la ley 8912;
de la ley 6254 y en especial sus arts. 2º, 3º inc. c, 4º y 5º, sin olvidar el
art 101 de los decreto 1359/79 y 1549/83, reglamentario de la ley 8912. No
aparecen ni remotamente esbozados los límites que plantean las leyes arriba
mencionadas y siquiera un mínimo de lo que para nosotros reflejaría un nivel de
complejidad alto, que así viene apuntado a continuación: 1º). Paradigmas en
cosmovisión de mecánica de fluidos, muy por encima y bien anterior al modelo
territorial. 2º). Compromisos ecosistémicos ineludibles con territorios inmediatos.
3º). Compromisos medioambientales e interjurisdiccionales. Francisco Javier de
Amorrortu sigo
2. Muy por fuera
de la cuestión dominial, -no importa de quiénes fueran las tierras-, las
relaciones funcionales que sostienen las aguas de las islas ocupando el curso
del río Luján ya tendrían que haber sido atendidas hace 50 años. Atender estos
3 puntos permitirá fundar reconocimientos de los precisos cimientos, de los
enlaces, de los problemas de la mentada transparencia hidráulica que son
infinitamente más complejos que los de la interacción de las aguas con los
agujeros de las islas –que dicho sea de paso-, de naturales no tienen nada.
Como tampoco tienen nada de naturales los tributarios urbanos del Oeste, que
todos por igual se reconocen soberanamente MUERTOS en sus dinámicas
horizontales. Y que por ello, el tema 1º a considerar es mirar por la
cosmovisión hidráulica que generó estos engendros Y esto no se resuelve con la
mención en una escueta línea de esta propuesta refiriendo de la Ejecución
del proyecto de Vertedero de cota del Río Reconquista previo análisis
hidráulico.
3. Reiteramos:
los compromisos que trascienden de la inmediata cercanía a las áreas
metropolitanas y a las cuencas tributarias del Luján soberanamente MUERTAS,
necesitan de estas áreas para tallar solución. La atención de los compromisos
de las aguas que desde el Paraná de las Palmas bajan al Luján, es bien anterior
a los postres y a estos repartos de sueños. El uso de la expresión
“transparencia hidráulica” merece un premio publicitario aunque no soporte un
pellizcón hermenéutico que intente apurar confesión al soporte fenomenológico
que lo sostiene. Lo mismo cabe a la adjetivación calificando como naturales a
los terraplenes en las riberas de las islas y poniendo devoción en cuidar su
espacio central, a sostener con “transparencia hidráulica”. También a las cavas
criminales les vendrían bien estas adjetivaciones para sumar a los bellos
paisajes. Si con adjetivos son capaces de superar los obstáculos legales y de
enlaces entre ecosistemas, pues sigan insistiendo en ello.
4. Que un plan de
manejo de las islas del Delta se descuelgue como un santo que busca bendición
en la humildad de un virgen humedal, siendo que aún no ha formalizado
concientización de los compromisos atados que desde el aporte de estas zonas
debemos considerar para algún día cercano acercar a los tíos muertos que
guardamos en el ropero, no es para que los resuelvan el legislativo municipal y
una consultora. Si la situación de encierro de los tributarios urbanos del
Oeste ya es terminal, imaginemos entonces lo que será cuando aparezca la zona
de encierro prospectivada. En lugar de ello, se dedican a santificar las
depresiones y los terraplenes del cinturón insular, con la expresión
“transparencia hidráulica”. Miran a un mosquito e ignoran la montaña de barbaridades
que han generado descalabros hidrológicos urbanos de órdago en el corazón de
millones de vidas a las que ninguno de estos urbanistas aprecia mirar.
5. Vean lo que es
la estructura del COMIREC y pregunten por el plan MINFRA para el Reconquista en
el que muchos de estos mismos urbanistas, han participado. Sea entonces este
plan, disparador de demanda para poner en escala real nuestras obligaciones con
los descalabros hidrológicos, que de hidráulicas entendidas desde mecánica de
fluidos, no tienen nada; ni transparente, ni opaca. Compromisos obligados
tienen las aguas que ocupan el curso del Luján. Cuando adviertan los
compromisos de enlaces entre sistemas ecosistémicos y medioambientales que
caben, mucho antes de acreditar nombradía de áreas urbanas complementarias
otras que no sean de reservas para encontrar soluciones a problemas mayúsculos
y centenarios, la prisa por poner en marcha este plan será resuelta con los
obstáculos que desde el Código Civil regalan los arts. 2577 y 2572, más el
aporte de los mismos gráficos que dan soporte hidrológico a las recurrencias
medias ordinarias que aquí aparecen superadas en términos inefables.
6. Las
proyecciones demográficas planteadas en las áreas con “atipicidades” merecen un
paseo por el confesionario. Pero antes de ello, deberán enfrentarse con los
límites legales para escapar estas tierras a su dominio público y en caso que
algún día logren resolver esta cuestión, luego enfrentarse a los demás cuerpos
legales que también violan: art 2º, 3º inc. c, 4º y 5º de la ley 6254 y art 101
del DEC. 1549/83, que plantean los impedimentos para que estas tierras pierdan
su condición rural y por ello estas atipicidades se tengan que ir al… Por un
lado vemos a viejos pobladores que desean que todo permanezca igual y ya advierten
de cuántas formas serán excluidos por los vientos del mercado. Y por el otro,
ya están los mercaderes planteando atipicidades propias de núcleos urbanos con
botones de muestra de 160 Hab. x Ha Por cierto, todo esto viene vendido con el
envoltorio de los preciosismos virginales del caso: catecismo de humedales,
flora y fauna y "transparencia hidráulica".
7. Me resulta
oportuno preguntar a estos devotos de la carta de Ramsar, ¿qué imaginan que va
a pasar no sólo con el vértigo de transformaciones que espera a esta zona, sino
con los encierros de las zonas vecinas que no logran sacar sus aguas al Luján?
¿Acaso debería olvidarme de ellos para ir a defender el lobito de río e
impulsar en legislatura un sitio Ramsar en este lugar? Confieso que no es mi
vocación luchar en SCJPBA por flora y fauna en franjas de expansión que
estallan bajo presión. Sólo deseo ayudar a poner los factores, ya no de riesgo,
sino de desesperación, en el orden que cabe a la transición, para que lo
primero que se atienda sean los compromisos con los enlaces ecosistémicos,
luego con los enlaces medioambientales y por fin con los enlaces
jurisdiccionales de los que hasta este momento nada serio he visto; salvo
advertir que unos y otros van empujados por las lentas pero persistentes realidades
judiciales, en la misma prudente dirección.
8. No por ello
dejo de festejar estas iniciativas que declaran la necesidad de construir con
soportes palafíticos, de prohibir cavas criminales, de impedir la remoción del
piso Querandinense. Esto me parece maná caído del cielo y no tengo otra forma
de agradecer que seguir expresando -viendo que los rumbos se van corrigiendo-,
la necesidad de mirar por los enlaces que acabo de mencionar. Sólo así esta
transición se vivirá en relativa paz, seriedad y no poca creciente actividad.
La materia creativa siempre nos acompañará si actuamos con integridad. Saludo a
Sergio Massa y a Julio César Zamora con mi mayor aprecio porque no dudo que han
hecho esfuerzos para llegar a esto y sigo con ellos para ir más lejos.
Un abrazo, Francisco Javier de Amorrortu.
2 comentarios:
Contenta! Sr. Barbieri: gracias por su trabajo! Y extiendo mis saludos a todos los ambientalistas!
Para quien aprecie mirar por las aguas someras en planicies extremas, sus dinámicas horizontales y sus compromisos en los enlaces ecosistémicos, los cambios de paradigma en mecánica de fluídos, las prospectivas y propuestas al devenir mediterráneo de Buenos Aires y las 33 demandas de hidrología urbana subidas a las CSJN y SCJPBA, acerco estas tres películas que totalizan 300 minutos de exposición directa y espontánea.
Sobre crímenes hidrogeológicos y cadáveres hidrológicos 95 minutos ver por http://www.hidroensc.com.ar/incorte92.html
Sobre cambios de paradigma en mecánica de fluídos 90 minutos Ver por http://www.delriolujan.com.ar/manadelcielo.html
Sobre prospectivas y propuestas al devenir mediterráneo de Buenos Aires 120 minutos Ver por http://www.alestuariodelplata.com.ar/prospectivas4.html
Saludo atte. Francisco Javier de Amorrortu
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