El 29/3/08 se procedió a la clausura de cinco basurales a cielo abierto en Tigre. El operativo que comenzó el jueves 28, se realizó en conjunto entre funcionarios y técnicos del Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible, Policía Ecológica y la Municipalidad de Tigre. Los basurales clausurados están en Benavidez, Villa La Ñata y Rincón de Milberg.
En los operativos fueron realizados sobre terrenos privados. Se clausuraron cerca de 10 hectáreas, fueron detenidas dos personas y confiscados dos camiones, uno con residuos considerados especiales.
El primer basural es un predio de una hectárea en el que se habían volcado residuos domiciliarios, de poda y escombros, ubicado en ruta N ° 27, altura 1770, de Benavidez. El segundo, ubicado también sobre la ruta N ° 27 en su intersección con la calle Pizzurno, es un terreno de 8 hectáreas donde se volcaban, además de residuos domiciliarios y escombros, desechos industriales.
En los operativos fueron realizados sobre terrenos privados. Se clausuraron cerca de 10 hectáreas, fueron detenidas dos personas y confiscados dos camiones, uno con residuos considerados especiales.
El primer basural es un predio de una hectárea en el que se habían volcado residuos domiciliarios, de poda y escombros, ubicado en ruta N ° 27, altura 1770, de Benavidez. El segundo, ubicado también sobre la ruta N ° 27 en su intersección con la calle Pizzurno, es un terreno de 8 hectáreas donde se volcaban, además de residuos domiciliarios y escombros, desechos industriales.
Otros dos basurales fueron clausurados en la localidad de Villa La Ñata, en tanto que la quinta clausura se realizó en un predio de la calle Dellepiane, en el camino al barrio cerrado “Boat Center”.
Durante los procedimientos intervino la Fiscalía de Benavidez a cargo de la Dra. María Inés Domínguez, actuando ante la presunta comisión de delito de contaminación según lo marcan la legislación provincial y nacional.
De la actividad de campo se pudo observar que además de residuos domiciliarios y de poda, en los predios clausurados se habían depositado desechos industriales de distinto tipo, cuyo grado de peligrosidad para el ambiente, será determinado por los análisis de laboratorio.
Durante los procedimientos intervino la Fiscalía de Benavidez a cargo de la Dra. María Inés Domínguez, actuando ante la presunta comisión de delito de contaminación según lo marcan la legislación provincial y nacional.
De la actividad de campo se pudo observar que además de residuos domiciliarios y de poda, en los predios clausurados se habían depositado desechos industriales de distinto tipo, cuyo grado de peligrosidad para el ambiente, será determinado por los análisis de laboratorio.
Lo cierto es que los habitantes de Vicente López, San Martín, San Isidro, San Fernando y Tigre, están bebiendo agua contaminada con cromo hexavalente y plomo, desde el momento mismo en que el acueducto presentó las grietas o fisuras mencionadas.
La empresa se dedicaba fundamentalmente al desabastecimiento de aerosoles, operación esta consistente en un perforado y compactado del envase acompañado de un sistema de recogido de los líquidos. Posteriormente, tanto los envases compactados como los líquidos resultantes, eran colocados en tambores metálicos de 200 lts los cuales eran termodestruídos, compactados y dispuestos como chatarra de hierro. Las cenizas se destinaban a la fabricación de bizcochos cerámicos.
Según Monseñor Gianfranco Girotti, Director de la Penitenciaría Apostólica, el organismo católico encargado de velar por las confesiones y las indulgencias de la Iglesia, los fieles deberán tener en cuenta otras faltas graves a la hora de su examen de conciencia: el daño ambiental, la manipulación genética, el narcotráfico, el consumo de drogas y la acumulación de riqueza.
4) Incorporar tecnologías y procesos ambientalmente aptos y adecuados a la realidad local y regional.
Edificada en 1879, el edificio de características italianizantes perteneció a una familia de la burguesía porteña. En el año 1949 pasó a manos del Club Atlético Tigre. Durante años fue uno de los centros de actividades sociales más importantes de la ciudad, pero hacia la década del ´80, comienza su decaimiento. Pero no obstante su abandono y deterioro, terminó por convertirse en un icono para la ciudad de Tigre.
Este edificio, además de poseer un gran valor arquitectónico, en conjunto con otras casonas antiguas cercanas, conformaba parte esencial del Casco Histórico, cuyo valor simbólico era vital para la consolidación de la identidad cultural y mantener viva la memoria.




