Cada 22 de marzo, desde el año 1993, se celebra en todo el mundo el Día Mundial del Agua.
Se trata de una fecha elegida por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo en 1992, destinada a la difusión y concientización sobre la importancia del agua dulce y de los problemas que se presentan actualmente.
Lo cierto es que en todo el mundo los recursos hídricos se reducen de forma constante. Al crecer la población del planeta, cada vez se consume más agua.
Se calcula que cada ser humano ingiere entre unos dos y cuatro litros de agua por día, ya que se cuenta no sólo el agua que bebemos sino la cantidad que implica la producción de cada alimento que consumimos.
El Día Mundial del Agua 2012, está enfocado en difundir la cantidad de agua que requiere la producción de alimentos. Pretende hacer un llamado de atención sobre productos que implican más consumo de agua y alienta a preferir aquellos que requieren un uso menos intensivo de este imprescindible recurso que tanto hay que cuidar.
También uno de sus objetivos es parar ya con el desperdicio de comida, que conlleva un gasto innecesario increíblemente alto de agua.
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